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En el "Día de la futbolista": ¿Cómo es el presente del fútbol femenino en Argentina?

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El fútbol en Argentina es pasión de multitudes. Un amor que no sólo se siente en las canchas, sino también en las calles, en las plazas y en cualquier lugar donde haya una pelota cerca. Es una forma de vivir.

El 21 de agosto es el Día de la futbolista en reconocimiento al histórico primer triunfo de la Selección Femenina de Argentina, Las Pioneras, en un Mundial: fue en 1971, ante Inglaterra por 4-1 en el estadio Azteca de México, con cuatro goles de Elba Selva, la 10 del equipo.

Desde aquella victoria a hoy pasó más de medio siglo para un fútbol que sufrió muchos años de invisibilización y otros tantos de lucha hasta que la semi-profesionalización de 2019 marcó un antes y un después, aunque todavía queda mucho camino por recorrer, y por crecer, para el fútbol femenino nacional.

El país de los campeones del mundo, tal como se repite desde 2022 a partir de la consagración del seleccionado masculino de Lionel Messi y compañía, todavía no parece demostrarle a una parte de su deporte más popular el respeto que le corresponde.



LA SELECCIÓN ARGENTINA, ¿UNA EXCEPCIÓN?

Actualmente, la Selección Argentina femenina disfruta de un buen presente con el tercer puesto en la reciente Copa América que se disputó en Ecuador, donde consiguió su tercer podio consecutivo en el certamen más importante del continente.

El equipo dirigido por Germán Portanova confirmó su lugar entre las potencias sudamericanas detrás de Brasil y Colombia, tuvo un importante recambio de jugadoras y se fue con la sensación de que estuvo a la altura de las expectativas.

Más allá de algunas cuestiones aún a mejorar, en general en el conjunto albiceleste sí se percibe una diferencia en el apoyo a nivel deportivo e institucional que se reflejan en el rendimiento dentro de la cancha, en las giras en las que compite el seleccionado y en las condiciones en las que entrenan

Fue una gran Copa América para Argentina, pero pocos la pudieron ver. Con poca difusión y sin trasmisión por canales públicos ni abiertos, la Selección compitió lejos de los ojos de los hinchas que las querían alentar y que recordó a una frase que quisieron derribar futbolistas luchadoras como Estefanía Banini, ya retirada del equipo: “Lo que no se ve, no existe”.

¿HAY UN RETROCESO DEL FÚTBOL FEMENINO A NIVEL LOCAL?

El fútbol femenino a nivel local no parece vivir las mieles de la Selección Argentina. Entre la falta de inversión, la intermitente voluntad dirigencial y la poca difusión, los clubes atraviesan un presente difícilcon desafíos y falencias que van de la mano con otro contexto a nivel social, económico y político mucho más hostil que cuando se profesionalizó en 2019.

Si bien AFA exige que haya al menos quince jugadoras profesionales con contrato registrado, con un sueldo neto de un monto que está por debajo de una canasta básica y que sería equivalente al de la Primera C masculina.

En diálogo con Feminacida, Agustina Arias, delantera de Boca, dio su punto de vista sobre la actualidad del deporte, qué falta para mejorar y palpitó la Copa Libertadores que se disputará en el país en octubre.

“A a nivel competitivo siento que se igualó bastante en lo físico. Los equipos más grandes no sacan tanta diferencia como antes, pero el futuro no lo veo tan claro. Creo que falta mucho para mejorar para crecer en los próximos años”, afirmó la joven atacante de las Gladiadoras.

Luego de su profesionalización, la TV Pública y DeporTV transmitían todos los partidos de Primera División, además de TNT Sports, con apoyo de grandes sponsors que permitieron que la disciplina crezca muchísimo. A partir del gobierno de Javier Milei, no hay difusión pública ni gratuita. TNT Sports transmite los encuentros de Primera División, pero solo lo hace con dos por fecha y otros salen por el canal de YouTube de los clubes. 

“Para que el fútbol crezca falta más difusión. Que se transmitan pocos partidos no ayudan. Necesitamos que los clubes le den la importancia y el espacio. Que nos den los estadios, son cosas chiquitas que marcan la diferencia. Así todas las jugadoras podamos tener lo que necesitamos y vivir de esto, no como la mayoría que tienen que trabajar a la par”.

Sobre la Copa Libertadores en Argentina, Arias contó: “Va a ser muy lindo de vivirla acá en el país. Sabemos que los hinchas van a todos lados. Esperamos que haya mucha gente y eso nos pueda dar un plus como siempre. Eso también va a ayudar a que el fútbol argentino crezca y se pueda visibilizar un poco más”.



LOS RECLAMOS CONTINÚAN

Newell’s, flamante bicampeón del fútbol argentino tras la conquista de la Copa Federal y el Campeonato de Primera División, se convirtió en el primer club del interior del país en ganar un título en Primera, incluyendo su nombre a la lista junto a Boca, River, San Lorenzo y UAI Urquiza como los únicos clubes campeones de AFA desde 1991 hasta la actualidad.

En junio, las jugadoras de la Lepra denunciaron atrasos en el pago de salarios y premios acordados: “Pese a haber cumplido con nuestras obligaciones con compromiso, responsabilidad y profesionalismo, no hemos obtenido respuesta alguna por parte de la institución, lo cual agrava aún más la situación”.

Además, aclararon que no era la primera vez que se daba este tipo de incumplimientos y exigieron “un mayor respeto institucional hacia quienes formamos parte de este proyecto deportivo”.

En julio, fue San Lorenzo quien sumó su reclamo contra la dirigencia por “malas condiciones para entrenar, competir y vivir que no merecemos”.

En el comunicado, las futbolistas, respaldadas por su cuerpo técnico, contaron detalles que son injustificables para una institución deportiva como la de Boedo. Hace meses no tienen con cobertura médica ni médico, así como tampoco insumos básicos en caso de una rehabilitación. Las canchas de entrenamiento están en mal estado, tienen sola muda de ropa, no cuentan con vestuario propio ni baños en condiciones y tienen problemas con los traslados a los partidos.

“Nuestros sueldos también se ven afectados. No hemos cobrado ningún viático desde principio de año y tampoco los premios del año pasado por haber sido campeonas del torneo 2024”, señalaron las Santitas sobre la situación actual de sus salarios y, además, denunciaron que no hay cuidado ni gestión con las divisiones juveniles del club, muchas de las cuales viven en la pensión.

Ni lo de Newell’s y lo de San Lorenzo es un hecho aislado, sino que se simbolizan la falta de apoyo que sufren cada vez más varios de los equipos a lo largo del país. Resulta llamativo porque se trata, por un lado, de las actuales campeonas del fútbol argentino y por otros, de uno de los clubes más fuertes de los últimos años como San Lorenzo. Si ni siquiera los resultados y el éxito alcanzan para que tengan apoyo, ¿qué alcanzará? ¿Qué les queda a los clubes más chicos y más alejados del interior o del ascenso?

EL CASO DE UAI URQUIZA, LAS CAMPEONAS QUE JUEGAN EN LA B

“UAl Urquiza anuncia su decisión, acordada con las autoridades de la AFA, de competir en la temporada 2025 en la categoría amateur de fútbol femenino (Primera B)”, así comunicó uno de los equipos más ganadores del fútbol femenino que no iba a seguir jugando en la Primera División, en enero de este año.

UAI Urquiza surgió en 2009 de la fusión entre Ferrocarril Urquiza y la Universidad Abierta Interamericana. Conquistó cinco títulos de Primera División -2012, 2014, 2016, 2018 y 2019- en la era amateur. Desde la semiprofesionalización en 2019, sólo ganó la Copa Federal 2021.

Fue uno de los grandes animadores del torneo argentino desde su creación proyectó constantemente jugadoras a la Selección Argentina y disputó la Copa Libertadores en cuatro ocasiones, subiéndose al podio en la edición de 2015.

Según el club, pidió descender de categoría por falta de sponsors para “optimizar recursos y concentrar esfuerzos en un proyecto deportivo sostenible, fortalecer la estructura institucional y seguir contribuyendo al crecimiento del fútbol femenino argentino”.

“No nos esperábamos esta noticia, fue sin previo aviso. Nos dijeron que teníamos un mes y medio para dejar los departamentos, que nos iban a ayudar a conseguir otros clubes”, le contó una ex futbolista de El Furgón a Tiempo Argentino.

Bajar a la B es un desprestigio y descender es una mancha que no se borra nunca más en el fútbol, como suele cantarse en cualquier cancha. Por eso, la decisión de UAI Urquiza es polémica y abrió una preocupación para los clubes en general sobre cómo sostenerse en la máxima categoría, que crece a paso lento y con un interés dirigencial dispar y coyuntural.



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